Puede que este listado de los mejores países para trabajar sea la excusa perfecta para comenzar una nueva aventura laboral (con éxito casi asegurado).
Tal vez sientas que ha llegado el momento de moverse. Después de analizar fríamente la situación, observas que con tu perfil podrías estar ganando mucho más dinero en otro lugar del mundo.
Te contamos cuáles son los países en los que existen las mejores ofertas de trabajo en la actualidad, qué tipo de empleos son los más demandados y qué facilidades encontrarás para asentarte en ellos. Convertirse en un expat (expatriado) o en un expat en serie. Puede que sea la solución que buscas.
Los mejores países para trabajar de lo tuyo sin que suponga una aventura de riesgo para tu cartera
Alemania
Quién no sabe a estas alturas que Alemania es el principal motor económico de Europa y, por lo tanto, uno de los mejores países para trabajar del mundo. Pero además, las garantías entre la conciliación de vida familiar y profesional, junto con la seguridad que ofrece en el trabajo lo han convertido en uno de los países más deseados por los expatriados (sobre todo europeos), según la encuesta que realiza anualmente el banco HSBC Expat Explorer.
Otro de los puntos a su favor es que en Alemania, por lo general, no se entiende la inmigración como una amenaza, sino más bien como una inversión de futuro. Con un poco de alemán básico (si lo solicitas, el Estado te paga un Deutsch Intensive Kurs o curso intensivo de alemán, que dura varios meses) tendrás infinitamente más posibilidades.
Desde hace años, la web Make it in Germany reúne toda la información útil para aterrizar. Desde marzo de 2020 han puesto en marcha una fuerte campaña de búsqueda y atracción de mano de obra europea fundamentalmente, con alto nivel de cualificación: cocineros, enfermeros, cuidadores de personas mayores, expertos informáticos, desarrolladores de software…
Si buscas salidas como autónomo, has de saber que solo pagan unos 140 euros al mes y, si no llegas a los 1.700 euros de beneficios limpios, no pagas ningún impuesto.
Bahrein
Bahrein, concretamente su capital, Manama, es otro de esos lugares que deberías barajar. En la ciudad, prácticamente todo el mundo habla inglés, por lo que a un expatriado no le será difícil encontrar trabajo si tienes un nivel medio alto: banca, seguros, turismo, servicios marítimos, plásticos, plantas solares, hidrocarburos, industria, educación… Eso sí, no se permite a ningún extranjero residir en el país sin contrato de trabajo, casa y buen estado de salud.
En webs como Gulf Talent encontrarás numerosas ofertas de trabajo en todo Oriente Medio. Y lo normal es que las propias empresas contratantes te pongan a tu disposición a un empleado que buscará un alquiler apropiado a tus necesidades en algún complejo residencial para extranjeros, porque prácticamente, y esa es una de las desventajas, no interactuarás más que con otros expatriados como tú durante el tiempo que estés trabajando allí.
Los sueldos, según el gremio y el nivel de responsabilidad, están en torno a los 10.000 euros mensuales, y los expatriados están exentos del impuesto sobre la renta, lo que hace que la calidad de vida en el país sea muy alta y puedas ahorrar un dinero de forma rápida.
Corea del Sur
Seúl se ha convertido en otro foco de atracción para aquellos trabajadores cualificados de industrias como la electrónica, la automoción o las telecomunicaciones. Algunas de las principales empresas del mundo de estos sectores tienen allí una de sus sedes.
Trabajos bien remunerados, cientos de oportunidades online en una de las capitales mundiales de la tecnología, pero eso sí, todos los expatriados coinciden en cuesta bastante adaptare a la cultura del trabajo coreana: horarios infinitos, 15 días anuales de vacaciones –está mal visto cogerse todos los días seguidos– y una estructura jerárquica que prácticamente impide expresar opiniones.
Aunque puedes echar un vistazo a las numerosas webs de expatriados que existen, un método efectivo para encontrar trabajo en Seúl es entrar en los portales de trabajo de esa ciudad, que suelen tener buenas ofertas o directamente en la página oficial de la empresa en la que quieres trabajar y buscar ofertas.
Emiratos Árabes Unidos
Dubái o Abu Dabi son la meca para muchos expatriados: el 85% de la población que vive y trabaja en EUA son extranjeros. Imprescindible tener un nivel alto de inglés y una visa de trabajo y será la propia empresa la que se encargue de conseguirte también el alojamiento.
Aunque no es exactamente lo que se dice una ciudad amable para vivir, y sí una de las más caras del mundo –el coste de la vivienda, la comida o el transporte es mucho más superior que en España– también lo son los sueldos, a partir de unos 5.000 o 6.000 euros al mes en adelante.
Perfiles que están llamados a un éxito seguro en Dubai son todos lo que tengan que ver con la ingenería, finanzas, tecnología, sector energético, construcción, arquitectos, aparejadores, diseñadores, expertos en ventas y marketing, sector petrolífero e informática.
Últimamente reciben con buenos ojos propuestas de proyectos culturales, una cuestión en la que los países árabes están poco desarrollados. También, energías alternativas y profesores universitarios. La mayoría de los contratos de trabajo son de dos años, con posibilidad de prórroga.
Suiza
Con una tasa de desempleo del 4,8 %, Suiza es uno de los mejores países para trabajar encontrar trabajo del mundo. Ofrece una alta calidad de vida y salarios elevados (para un perfil cualificado el sueldo estará en torno a los 4.500 euros y hasta los 10.000 euros en el sector bancario y financiero). Eso sí, el seguro médico te lo tendrás que pagar tú y darte de alta en alguno de los que existen.
Para facilitar la conciliación de la vida laboral y la integración de los trabajadores, numerosas empresas ofrecen la posibilidad de buscar trabajo para el cónyuge o la pareja del candidato seleccionado, además de cursos de idiomas de manera continuada.
Hay que tener en cuenta que en este país la industria química, la farmacéutica, la relojera y la bancaria ofrecen muchísimas oportunidades. Si, además de un alto nivel de inglés, tienes un buen nivel de alemán, francés o italiano, dependiendo del cantón, tu éxito está asegurado.
Australia
Dice el fundador de expat.com que Australia está llamada a ser, si no lo es ya, uno de los principales receptores de expatriados en el mundo porque es el lugar perfecto para profesionales recién licenciados que buscan ampliar sus horizontes, mejorar su inglés y conocer un país inmenso y tremendamente singular. Si además consideramos su relajada cultura, la espectacularidad de los paisajes de este país continente y que están cerca del pleno empleo, la opción no puede ser mejor.
Para ello, y una vez que decidas en qué ciudad quieres vivir, deberás conseguir el TFN (Tax File Number), si vas a trabajar por cuenta ajena, y el ABN (Australian Business Number) para trabajar por cuenta propia. No te preocupes porque te lo ponen muy fácil.
Simplemente para la obtención de visados, cuentan con numerosos tipos: desde un visado Work and Holiday, que permite trabajar a tiempo completo durante un año ampliable a dos, para personas entre los 18 y los 36 años –está pensado para seguir formándose en este país–. O su Skilled Nominated Visa dirigido a determinados perfiles profesionales que se necesitan en el país. Cada año publican una lista: chefs, arquitectos, médicos y enfermeros, hostelería, dentistas, ingenieros, fisioterapeutas, veterinarios, entrenadores deportivos…
¿Y si te reconviertes en un nómada digital?
Tal vez lo de los horarios poco flexibles ya no es para ti. Prefieres organizarte tus tiempos. Pues si trabajas en marketing, comunicación, consultoría, producción, traducción, idiomas… o tienes tu propio blog que comienza a funcionar, a lo mejor la opción que andas buscando es la de convertirte en un nómada digital.
Existen plataformas como Hacker Paradaise y Remote Year donde gente con estos perfiles se encuentran y viajan juntos, además de trabajar. Así, al menos no echan de menos interactuar con otras personas que pasan por su mismo momento vital, hacer excursiones en los destinos en los que trabajan, pasar un buen rato… Por lo general, estos perfiles buscan ciudades baratas y seguras, suelen compartir estudios y apartamentos, espacios de coworking y se marcan sus propios ritmos de trabajo.